Los planes de Rusia en el espacio

Se habla mucho de los planes de futuro de Rusia en el espacio, pero en ocasiones se suele mezclar la fantasía con la realidad o los proyectos "privados" de algunas empresas con los programas oficiales apoyados por Rokosmos. Estos objetivos oficiales se basan en las propuestas de proyectos espaciales aprobadas el 24 abril 2008 por el presidente de la Federación Rusa, así como en el plan de actividades espaciales para el periodo 2006-2015 aprobado por el gobierno ruso mediante la orden nº 683 del 15 septiembre de 2008. Las prioridades del gobierno ruso en el espacio son las siguientes:

1. El sistema de navegación GLONASS.
2. Construcción del cosmódromo de Vostochny.
3. Desarrollo del cohete Angará.
4. Desarrollo de una nueva nave tripulada (PPTS) y su lanzador.

GLONASS

El programa de posicionamiento global GLONASS se ha convertido en una prioridad estatal al máximo nivel, por lo que en muchos aspectos recibe una atención separada del resto de actividades espaciales. El desarrollo y explotación del sistema GLONASS se rige según la orden gubernamental nº 680 del 12 de septiembre de 2008. Actualmente hay 19 satélites GLONASS en servicio y durante este año Roskosmos planea lanzar otros seis, completando la constelación de 24 unidades. El año que viene Rusia piensa declarar el sistema operativo a nivel global con el lanzamiento de seis satélites más. En 2011 se terminará la constelación, incluyendo las unidades de reserva. Los satélites GLONASS están construidos por la empresa OAO ISS Reshetnyov.


Satélite GLONASS (OAO ISS).

Lanzadores

Está claro que la fuerza del programa espacial ruso radica en los cohetes lanzadores, por lo que una de las prioridades es su renovación y la construcción de nuevas instalaciones. El cohete Angará de Khrunichev deberá convertirse en la espina dorsal de los lanzadores rusos en la próxima década, aunque está por ver si la competencia interna de los cohetes tradicionales Protón, Soyuz y Zenit -de gran éxito comercial- dejará de ser un serio obstáculo en su desarrollo. El nuevo cohete de TsSKB Progress que lanzará a la sustituta de las Soyuz será igualmente clave para el futuro espacial del país.


Familia Angará (Roskosmos).


Propuestas del nuevo lanzador para la sustituta de las Soyuz (Anatoly Zak).

Satélites y sondas

Frente al éxito de los lanzadores, la industria de satélites y naves espaciales no tripuladas ha experimentado serios problemas de financiación y competitividad en los últimos años. Por este motivo, el desarrollo de satélites es una de las prioridades de la agencia espacial rusa. Roskosmos planea continuar con el lanzamiento de satélites de observación terrestre, entre los que destacan los siguientes:

• Resurs: los satélites de observación terrestre Resurs están basados en el diseño de los satélites espía Yantar y están construidos por la empresa TsSKB Progress de Samara. Desde su lanzamiento en 2006, el Resurs-DK1 ha funcionado sin problemas. Roskosmos espera poder lanzar el Resurs-P en 2010.

Resurs-DK1 (TsSKB Progress).

• Elektro-L (GOMS-2): se trata de un satélite de observación meteorológico geoestacionario construido por NPO Lávochkin que debe volver a colocar a Rusia entre los países con satélites de este tipo, tras carecer de un aparato de estas características durante muchos años. El lanzamiento del GOMS-2 deberá tener lugar este año desde el cosmódromo de Baikonur mediante un cohete Zenit-3F.
  

Electro-L (NPO Lavochkin).

• Kanopus-V: estamos ante otro satélite de observación terrestre, en este caso un sucesor de la famosa serie Meteor. A diferencia de los Resurs, se trata de un satélite de nueva generación construido entre NPP VNIIEM y la empresa británica SSTL. El lanzamiento de la primera unidad está previsto para este año mediante un Soyuz-FG.
  

Kanopus-V (NPP VNIIEM).

• Meteor-M: último representante de la mítica serie de satélites meteorológicos Meteor de la empresa NPP VNIIEM. El primer ejemplar debe despegar este año a bordo de un Soyuz-2.

Meteor-M (NPP VNIIEM).

Por otro lado, los satélites de comunicaciones rusos de nueva generación están representados por la serie Yamal de RKK Energía y Express-AM33 de OAO ISS Reshetnyov. Sin embargo, el principal punto débil de la industria aeroespacial rusa ha sido tradicionalmente su segmento de satélites científicos y sondas espaciales. Por motivos que darían para varias entradas, la ciencia nunca ha ocupado un lugar destacado en las prioridades espaciales de la URSS y Rusia. En los últimos años Roskosmos ha intentado promocionar varios proyectos científicos con el objetivo de mantener la base industrial y de recursos humanos que se estaba perdiendo en este sector a pasos agigantados desde la caída de la Unión Soviética. Está claro que en la actual situación de crisis económica los proyectos científicos son los que más van a sufrir el azote de los recortes presupuestarios, pero los priorizados por Roskosmos son los siguientes:

• Coronas-Photon (o Koronas-Foton): satélite de observación solar basado en el Meteor-3M construido por NPP VNIIEM. Se trata del primer satélite astronómico ruso en muchos años y fue lanzado con éxito el pasado 30 de enero de este año por el último cohete Tsiklon-3. El anterior satélite de la serie Coronas, el Coronas-F, fue lanzado en 2001 y estaba basado en la plataforma AUOS-SM desarrollada por la empresa ucraniana Yuzhnoe.

Coronas-Photon (NPP VNIIEM).

• Spektr-R: satélite dedicado a la radioastronomía construido por NPO Lávochkin dentro del Proyecto RadioAstron. Aunque su desarrollo comenzó hace ya muchos años, ha sufrido innumerables retrasos debido a la falta de financiación. Consiste en un radiotelescopio de 10 metros de diámetro y una plataforma comercial de tipo Navigator fabricada por Lávochkin. Deberá ser lanzado en 2010 mediante un Zenit-3F (vídeo).

Spektr-R (NPO Lavochkin).

• Spektr-UV: otro observatorio astronómico de NPO Lávochkin, también conocido fuera de Rusia como World Space Observatory (Ultraviolet). Portará un telescopio ultravioleta T-170M (de 1,70 m de diámetro) sobre una plataforma Navigator. Su diseño está basado en los satélites espía del tipo Araks y deberá ser lanzado por un Zenit-3F. También ha sufrido muchos retrasos y se desconoce el estado real de su desarrollo.

Spektr-UV (NPO Lavochkin).

• Spectrum-RG/eRosita/Lobster: observatorio de rayos X en la región de los 2-12 keV que debe ser construido en cooperación con la ESA y emplearía la plataforma Navigator. También denominado Spektr-RG.
  

Spectrum-RG (Roskosmos/ESA).

• Resonance: proyecto internacional consistente en una constelación de satélites para estudiar la magnetosfera terrestre de forma análoga a los satélites Cluster de la ESA. Actualmente se encuentra en fase de estudio.
• MetNet: proyecto para crear una red sismológica en Marte a base de sondas penetradoras. Podría salir adelante con el apoyo de la ESA. Una misión precursora volará con la Phobos-Grunt.
  
• Interhelioprobe: proyecto de telescopio solar para estudiar nuestra estrella desde un plano fuera de la eclíptica y a diversas distancias. Se halla en fase de estudio y sería construido por NPO Lávochkin.

Interhelioprobe (NPO Lavochkin).

Uno de los problemas del programa espacial científico ruso es que la mayor parte de proyectos pertenecen a una única compañía: NPO Lávochkin, constructora de la práctica totalidad de sondas espaciales soviéticas y rusas. Esta empresa ha perdido mucho de los apoyos políticos de los que gozaba antaño, lo que constituye una de las razones que explican la falta de financiación hoy en día. Los proyectos principales de sondas espaciales para los próximos años son:

• Phobos-Grunt: se trata el proyecto estrella de NPO Lávochkin y el que más avanzado se encuentra en su desarrollo. Aunque debía despegar este año, parece que finalmente habrá que esperar a 2011.
• Luna-Glob 1: proyecto de orbitador lunar en fase de estudio avanzada.

Luna-Glob (NPO Lavochkin).

• Luna-Glob 2: proyecto de aterrizador lunar en fase de estudio. Podría incorporar un rover de nueva generación.
• Luna-Grunt: propuesta de misión para recogida de muestras.

Luna-Grunt (Roskosmos).

• Venera-D: propuesta de misión planetaria para 2016 que incluye un aterrizador y 3 ó 4 globos. Esta sonda de NPO Lávochkin de 8 toneladas, descendiente de la mítica serie Venera, debería ser lanzada por un Soyuz-2.

Venera-D (NPO Lavochkin).

Astronáutica tripulada

El programa tripulado es el corazón de la cosmonáutica rusa y el terreno de juego de la compañía RKK Energía, fabricante de las naves Soyuz y Progress. Este año deberán comenzar las expediciones permanentes de seis miembros en la estación espacial internacional, que, sumadas a la retirada inminente del transbordador, traerán como resultado el aumento de lanzamientos rusos hacia la ISS. Hasta ahora, el ritmo de lanzamientos había sido de dos Soyuz y tres Progress al año aproximadamente, pero deberá ser incrementado para hacer frente a los requisitos de esta nueva etapa. Este año se lanzarán tres Soyuz TMA, pero en 2010 y 2011 se planean cuatro lanzamientos de TMA y TMA-M. Asimismo, durante 2009 veremos el despegue de cuatro Progress, pero serán seis en 2010 y siete en 2011. Además, Roskosmos planea lanzar seis módulos a la ISS en los próximos seis años para completar el segmento ruso. Este año se lanzará el módulo MIM-2 (o MRM-2) y el año que viene el MIM-1. En 2011 deberá despegar el MLM y en 2013 el módulo UM (DM), al que se acoplarán los módulos NEM-1 (SPM-1) y NEM-2 en 2014 y 2015, respectivamente. En principio, Roskosmos prevé mantener la ISS operativa hasta 2020, aunque obviamente habrá que esperar a ver las decisiones que tome la NASA y la ESA sobre el futuro de la estación.


Esquema de lanzamietos a la ISS (Roskosmos).


Segmento ruso de la ISS en 2015 (RKK Energía).

No obstante, el desafío principal de la cosmonáutica tripulada lo constituye el desarrollo de la nueva nave PPTS (Rus) y su lanzador. La nave deberá ser construida por RKK Energía, mientras que el cohete correrá a cargo de TsSKB Progress.


La PPTS (Anatoly Zak).

Vostochny

El futuro cosmódromo de Vostochny se encuentra situado en el actual centro espacial de Svobodny (una antigua base de misiles balísticos). Rusia considera una prioridad la construcción de este cosmódromo para no depender así de las volátiles relaciones con Kazajistán, país donde se encuentra ubicado el cosmódromo de Baikonur. El nuevo centro espacial deberá disponer de rampas para el Angará y el nuevo lanzador de la PPTS, así como de instalaciones de telemetría o para la fabricación y almacenamiento de combustible (queroseno e hidrógeno líquido) y oxidante (oxígeno líquido). Al estar situado cerca de la costa, el nuevo cosmódromo no tendrá las restricciones de lanzamiento ocasionadas por la caída de etapas que lastran muchas de las operaciones en Baikonur. La construcción de este centro espacial constituye un desafío de primer orden para la industria aeroespacial rusa.


Plano del futuro cosmódromo de Vostochni (Roskosmos).

En definitiva, planes y proyectos espaciales no le faltan a Rusia para mantener su posición como potencia espacial. El problema, sin duda alguna, radica en la capacidad de este país para poder encontrar financiación en plena recesión mundial y con los precios del petróleo por los suelos.