Las religiones necesitan de sus propios lugares de culto y estos pueden haber sido creados por las causas más diversas: nacimiento o muerte de un líder espiritual, acontecimientos extraordinarios, teofanías, etc.
Muchos de estos lugares se han convertido a lo largo de la historia en auténticos referentes mundiales para los seguidores de sus respectivas religiones llegando a ser incluso obligatorias las peregrinaciones a los mismos. Aún sin esta obligatoriedad, son muchos los creyentes que año tras año dirigen sus pasos hacia estas metas espirituales con el objetivo fundamental de sentirse más próximos a su fe.
Todos conocemos la importancia de lugares tan emblemáticos para sus respectivas religiones como Jerusalén (Judaísmo, Cristianismo), Santiago de Compostela (Cristianismo), La Meca (Islam), Benares/Varanasi (Hinduismo), Amristar (Sijismo) o Lumbini (Budismo) todos ellos con una antigüedad mas que venerable.
Pero lo más curioso es como en las últimas décadas están naciendo nuevos lugares de peregrinación asociados a estas mismas religiones. El porque quizás debamos responderlo ‘como la necesidad que tiene la especie humana de saciar una sed espiritual, un conocimiento de lo divino que nunca puede lograr alcanzar’.
JF
Muchos de estos lugares se han convertido a lo largo de la historia en auténticos referentes mundiales para los seguidores de sus respectivas religiones llegando a ser incluso obligatorias las peregrinaciones a los mismos. Aún sin esta obligatoriedad, son muchos los creyentes que año tras año dirigen sus pasos hacia estas metas espirituales con el objetivo fundamental de sentirse más próximos a su fe.
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| De La Historia en Mapas |
Todos conocemos la importancia de lugares tan emblemáticos para sus respectivas religiones como Jerusalén (Judaísmo, Cristianismo), Santiago de Compostela (Cristianismo), La Meca (Islam), Benares/Varanasi (Hinduismo), Amristar (Sijismo) o Lumbini (Budismo) todos ellos con una antigüedad mas que venerable.
Pero lo más curioso es como en las últimas décadas están naciendo nuevos lugares de peregrinación asociados a estas mismas religiones. El porque quizás debamos responderlo ‘como la necesidad que tiene la especie humana de saciar una sed espiritual, un conocimiento de lo divino que nunca puede lograr alcanzar’.
JF
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