El retraso del MSL ha provocado ya una pequeña crisis en el seno de la NASA y que se se replanteen muchos de los objetivos del programa de exploración marciano. La situación del MSL me hace pensar en la tendencia que tiene la NASA a embarcarse en sondas cada vez más complejas que incurren en sobrecostes y constantes retrasos. Hay que recordar que precisamente el actual programa de exploración de Marte nació tras el fracaso de la Mars Observer, que enterró la tendencia de sondas excesivamente complejas y caras. La política actual de la NASA combina misiones de bajo coste (Discovery), medio (New Frontiers) y alto (Flagship). Precisamente, la primera misión de tipo Discovery fue la Mars Pathfinder, pero los posteriores fiascos de la Mars Climate Orbiter y Mars Polar Lander pusieron de manifiesto los límites de la política "faster, cheaper, better" de Goldin. Al fin y al cabo, se necesita un mínimo de dinero para determinadas misiones interplanetarias. Mientras que en esta década hemos contemplado los éxitos gloriosos de los MER, Mars Odyssey, Mars Reconnaissance Orbiter y Phoenix, en el próximo decenio, aparte de Maven y MSL, puede que no veamos muchas más misiones de la NASA a Marte. ¿Necesita la NASA un cambio de política otra vez?
Estas novedades se han conocido en la Lunar and Planetary Science Conference (LPSC), así como las propuestas para otras misiones.

El MSL hace unos meses (NASA).

El escudo térmico de 4,6 m del MSL será el mayor enviado a otro planeta (NASA).
No comments:
Post a Comment