Tras 10 años de guerra de EEUU contra Vietnam, los avances realizados parecían no contentar a nadie. Fue entonces cuando el jefe de las fuerzas americanas en Vietnam, el general William Westmoreland solicitó un refuerzo militar para poder llevar a cabo una operación aérea a gran escala, algo que aprobaría el presidente Lyndon B. Johnson.
La Operación se denominó Rolling Thunder y sus objetivos consistían en la destrucción de la industria norvietnamita, así como sus infraestructuras: puentes, carreteras, vías férreas, y todo tipo de comunicaciones.
La operación dio comienzo en 1965 y se prolongó hasta 1968. Pero pese a su larga duración y a la gran cantidad de material bélico empleado (se realizaron mas de 300.000 misiones, se lanzaron 860.000 toneladas de bombas y se perdieron 92 aviones), no consiguieron doblegar la voluntad de la resistencia, ni los objetivos iniciales fueron alcanzados ni destruidos en su totalidad. Esta operación constituyó uno de los grandes fracasos de la Guerra del Vietnam.
La presidencia de EEUU no se dejó amedrentar; su orgullo había quedado tocado. Y una nueva operación comenzó a diseñarse pese a que la opinión pública empezaba a mostrar su desaprobación por la implicación en un conflicto tan lejano.
El 9 de mayo de 1972, se iniciaba la Operación Linebacker (que se prolongaría durante cinco meses) está vez bajo la aprobación del presidente Richard Nixon. Los objetivos fueron los mismos, pero la potencia de las nuevas bombas, hizo que los efectos fueran mucho más devastadores que en la anterior operación, consiguiendo destruir los objetivos propuestos.
La finalización de la operación trajo consigo que ambas partes se sentaran a negociar un alto el fuego en Paris en enero de 1973. Pero todavía quedaban dos años de duros enfrentamientos.
JF
La Operación se denominó Rolling Thunder y sus objetivos consistían en la destrucción de la industria norvietnamita, así como sus infraestructuras: puentes, carreteras, vías férreas, y todo tipo de comunicaciones.
La operación dio comienzo en 1965 y se prolongó hasta 1968. Pero pese a su larga duración y a la gran cantidad de material bélico empleado (se realizaron mas de 300.000 misiones, se lanzaron 860.000 toneladas de bombas y se perdieron 92 aviones), no consiguieron doblegar la voluntad de la resistencia, ni los objetivos iniciales fueron alcanzados ni destruidos en su totalidad. Esta operación constituyó uno de los grandes fracasos de la Guerra del Vietnam.
La presidencia de EEUU no se dejó amedrentar; su orgullo había quedado tocado. Y una nueva operación comenzó a diseñarse pese a que la opinión pública empezaba a mostrar su desaprobación por la implicación en un conflicto tan lejano.
El 9 de mayo de 1972, se iniciaba la Operación Linebacker (que se prolongaría durante cinco meses) está vez bajo la aprobación del presidente Richard Nixon. Los objetivos fueron los mismos, pero la potencia de las nuevas bombas, hizo que los efectos fueran mucho más devastadores que en la anterior operación, consiguiendo destruir los objetivos propuestos.
La finalización de la operación trajo consigo que ambas partes se sentaran a negociar un alto el fuego en Paris en enero de 1973. Pero todavía quedaban dos años de duros enfrentamientos.
JF
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