La Revolución de Asturias de 1934 fue el primer intento fallido del inicio de la Guerra Civil Española. Pero no fue ni un caso aislado, ni había carecido ya de precedentes.
El clima de agitación y descontento social nunca dejó de existir a lo largo de toda la vida de la Segunda República. Pero era necesaria una fuerza política o sindicalista que levantara al pueblo en armas. Desde noviembre de 1933, los levantamientos anarquistas (en rojo) se vinieron sucediendo por todo el país.
La excusa final vino dada por la inclusión en el gabinete de gobierno del republicano Lerroux de tres ministros de la CEDA (partido de la derecha opuesto a la republica). Esta formación fue rechazada de plano principalmente por el PSOE que declaró el gobierno ilegal y exigía la convocatoria de unas nuevas elecciones generales.
El 4 de octubre, el PSOE con el apoyo del sindicato UGT convoca una huelga general para el día 5. En el mapa se observa la incidencia que esta huelga tuvo y los principales focos (en marrón).
Aprovechando el desconcierto provocado por la huelga, Cataluña se convierte en el principal foco de altercados después de Asturias. En la noche del 6 al 7 de octubre, Lluis Companys de Ezquerra Republicana proclama el Estado Catalán. El gobierno central se verá obligado a actuar con el ejército que causará varias decenas de muertos y la disolución del recién constituido estado.
La Segunda parte puede verse en La Revolución de Asturias de 1934 Parte II
JF
No comments:
Post a Comment